París, un nombre tan pequeño para una ciudad tan grande. No importa cuantas veces se haya visitado París, siempre hay algo por descubrir. París es una ciudad de película que engatusa y enamora. Una ciudad que se puede disfrutar tanto de día como de noche. Una ciudad que nunca cansa al visitante.
Londres es uno de los destinos turísticos más importantes de Europa y de todo el mundo. En esta ciudad se puede encontrar todo un crisol de culturas diferentes provenientes de los lugares más recónditos del planeta. Se puede diferenciar entre la zona central de Londres, que es la más turística y de mayor interés para el viajero, y la zona "periférica" (que en realidad abarca la mayor extensión de la ciudad). Esta última zona es eminentemente residencial. Al contrario que en España, en la que las ciudades se organizan de forma más modular (cada zona tiene un centro de salud, sus escuelas, sus bares, sus tiendas, etc.), en Londres, al igual que en casi todo Reino Unido, suele existir un centro urbano más comercial y funcional y lo demás suelen ser zonas residenciales en las que para un español resulta siempre extraño no encontrar nada más que casas.
Muchas ciudades europeas se valen del mar o de ríos para su fundación. Sin embargo, pocas como Ámsterdam han sabido utilizar el agua e integrarla en la red de comunicaciones. Ámsterdam no es la Venecia del norte, es un concepto diferente de canales. En ella los canales están integrados en la ciudad, forman parte de las calles, son parte de la identidad de Holanda.
Al igual que otras muchas ciudades europeas, Berlín nació junto a un río hace casi 800 años. Su imagen actual es el resultado de una pasado con menos claros que oscuros con el que los berlineses son críticos y aceptan como parte de lo que son. La capital alemana hoy en día es una ciudad cosmopolita donde abunda la cultura. Los conciertos, teatros y conferencias son la tónica general en una metrópoli con más de cien teatros y una oferta cultural para todos los gustos. Una ciudad ideal para recorrer a pie, bicicleta o autobús mientras se conocen siglos de convulsa historia y se disfruta de la idiosincrasia alemana.
Decía Kafka, uno de los ilustres hijos de la capital checa, que Praga lo tenía en sus garras y no lo dejaba escapar. Algo así es lo que le pasa a quién visita Praga por primera vez, que ya no puede escapar de sus garras, de sus encantos arquitectónicos y gastronómicos que conforman un todo sin igual en Europa.
Un puente para gobernarlos a todos
De entre los diez puentes que sobrevuelan el río Moldava, el puente de Carlos IV es la más preciada joya de la ciudad. Este, que fue el primero, es una galería de arte en sí. Sus quinientos metros de pasarelas están custodiados por una treinta de advocaciones marianas y varios santos. La estatua de san Juan Nepomuceno es la más venerada por los praguenses, quienes piden sus deseos apoyando la mano izquierda sobre el pedestal. Pero el puente además es una galería de arte para los pintores aficionados que exponen sus obras al son de músicos de cuyos instrumentos salen las notas que compusieron los grandes como Mozart o Bach. Con este puente el emperador pretendía someter a las dos orillas de la ciudad bajo un mismo gobierno.
Si hay una ciudad ideal para disfrutar con todos los sentidos esa es Viena. La capital de Austria es música, gastronomía, olores y monumentos. Para muchos la más clásica de las ciudades europeas. Sus insignes ciudadanos le han legado una herencia cultural sin igual. Mozart, Beethoven, Freud, Sisí... son solo algunos de los personajes que han colaborado a remarcar a Viena en el mapa.
Un paseo por el centro de Viena
Para conocer y disfrutar Viena lo mejor es seguir una ruta por sus monumentos más importantes. El palacio de Hofburg es un buen lugar para empezar. Su fachada abre los brazos invitando a entrar a una de las maravillas de la ciudad. El complejo acoge las dependencias de los Habsburgo, la imponente Biblioteca Nacional y el Museo de Isabel de Bulgaria, Sisí Emperatriz. En el recorrido por las salas del palacio abundan los muebles estilo Luis XV y una valiosa colección de objetos de plata. La Escuela Española de Equitación está en un edificio adyacente, ofreciendo espectáculos donde los caballos danzan al son de la música clásica.