Visite los zocos, mercados donde se vende de todo, comida, ropa, joyas, muebles, artesanía, joyas etc. Podrá encontrar cosas a precios muy interesantes, y el regateo lo puede convertir en más interesante todavía. Un regalo para sus amigos pueden ser las especias, se mantendrán frescas mucho tiempo.
Cualquier visita debe partir de la plaza de Jamaa el Fna, el centro neurálgico de la ciudad, bullicioso día y noche. La Medina, el zoco, la mezquita Koutoubia, la más importante de la ciudad y una de las más grandes del mundo, la Madraza ben Youssef, la escuela del islam más grande de Marruecos, las Tumbas de la dinatía Saadí, el imponente palacio Bahia construido por el Sultán Si Moussa, o las ruinas del palacio Badi, "El Incomparable". Visite los Jardines de Menara, los de Majorelle y el palmeral de Marrakech. El museo de Marrakech, por el edificio y no por su contenido, y el museo de arte marroquí Dar Si Said son visitas recomendadas.
Marrakech, una visita imprescindible
Marrakech es un lugar diferente, colores únicos, olor a especias, gente alegre y bulliciosa, una visita inolvidable e imprescindible para los que quieran conocer una cultura y forma de vida diferente.
Para visitar Marruecos siendo español solo hace falta pasaporte en vigor, no tendrá problemas de idiomas, ya que por su pasado en la ciudad se habla árabe, francés y español. La moneda es el dírham, pero no tendrá problemas para pagar en Euros normalmente, aunque encontrará cajeros automáticos y podrá pagar con tarjeta en muchos lugares.
Situado en el interior, el clima es seco y cálido, en verano hace calor y en invierno no pasará frio de día, y por la noche las temperaturas son mas frescas. Los precios son más económicos que en España, deje una propina del 10% como cortesía en general por los servicios, pero cuando compre recuerde que los árabes tienen la arraigada costumbre del regateo, si compra algo en una tienda no tenga miedo de pedir una rebaja, negocie el precio, es divertido y se ahorrará un dinero.
Si toma un taxi, tenga en cuenta que hay de dos tipos, los pequeños para moverse por la ciudad y los grandes para viajar por los alrededores, es habitual que no se baje el taxímetro, por lo que al subir puede o bien pedir que lo ponga en marcha, o negociar el precio directamente. Puede usar un autobús, pero van siempre abarrotados
Marrakech es una ciudad típica árabe, la medina o ciudad antigua nos sumerge en los mundos de la mil y una noches, calles muy estrechas, a veces solo para una persona, continuas esquinas, desorden, oscuridad, pero no es inseguro pasear por sus calles, le sumergirán en un mundo nuevo y diferente. No olvide visitar la parte nueva de la ciudad, lo que le permiten ver la evolución de la ciudad hacia la cultura occidental, un contraste imprescindible con la ciudad vieja.