El viaje ha estado fenomenal, lo hemos pasado muy bien y casi todos los sitios visitados han sido espectaculares. El viaje ha alcanzado nuestras expectativas, cumpliendo el itinerario y realizando todo lo programado.
Mención especial a nuestro guía, Rafa, que lo ha dado todo, más allá de su obligación, ha tenido una paciencia infinita, nos ha dado mucha y muy buena información del país, de los lugares, del estilo de vida, de todo lo que íbamos a ver e indicaciones muy útiles al llegar a cada sitio, ha tenido un trato estupendo con toda la gente, en definitiva, ha hecho que el viaje fuera muy especial para nosotros. Si hubiera que calificarle, le daría un 15 sobre 10. Muchas gracias Rafa por todo
También, agradecer al conductor, a Sergio por su trato, su paciencia, su forma de conducir y su trato personal siempre con una sonrisa, aunque llevase todo el día conduciendo el autobús. Otro 15 sobre 10. Muchas gracias Sergio por todo
Al transporte no le doy 5 estrellas por el espacio tan justo del autobus, tanto los asientos como el pasillo eran muy justos.
Los hoteles, en general también bien, tanto las habitaciones, trato del personal y desayuno aunque con tanta gente a veces era muy caótico.
En línea con los hoteles, el problema era que íbamos 3 autobuses de Europa Mundo y coincidíamos en los hoteles todas las noches, haciendo que tanto la entrada, el desayuno como la salida fuese caótica por la acumulación de personas. En el desayuno se formaban unas colas interminables sólo para sacar un café, haciendo que se perdiese mucho tiempo.
En relación a las críticas, tengo tres que se pueden tomar como sugerencias para mejorar el viaje.
La primera es sobre el día del paso a Italia. Tantas horas de autobús para llegar muy tarde a Italia, Montano Lucino, pasando el túnel de San Gotardo y todo ello sólo para dormir, en mi opinión, es un error viniendo, además, de Glacier 3.000.
Particularmente, os propondría pasar por Zermat, para ver aunque sea de lejos el Matterhorn y después ir a Italia por el paso del Simplon, que está abierto todos los días del año para ver al día siguiente las gargantas de Aareslucht que son impresionantes.
La segunda, y no menos importante, es la tarde perdida en FELDKIRCH. Aunque el pueblo tiene un casco histórico bonito, toda una tarde allí es demasiado porque no tiene mucho que ver y nada que hacer, ni vimos apenas gente por la calle aun siendo sábado.
Aunque por el tipo de itinerario o su programación haya que pasar toda la tarde y la noche allí, propondría una visita opcional a la fábrica de cerveza que está al lado y que, complementaria a la visita de la fábrica de chocolate.
Y la tercera más que una sugerencia es un ruego para que mejoréis el viaje. Por favor, quitar la turistada del Guillermo Tell. No aporta nada al viaje y los pueblos que se ven tampoco tienen nada. Es una pérdida de tiempo que se podría invertir en, por ejemplo, la visita al Matterhorn.
Ah Otra cuestión. Por favor, quitar la cena Leysin. Aunque abarate muy poco el precio, por lo menos no tenemos que llevarnos la decepción por lo que se ofrece para cenar.
Gracias por todo y saludos a Rafa y Sergio de la pareja de madrileños ;-