Viajar a Sevilla da la oportunidad de conocer sus leyendas, transmitidas desde hace siglos, de intuir lo que hay de realidad y lo que pone la imaginación. Una ciudad que prácticamente vive para sus fiestas mayores: la Semana Santa y la Feria de Abril. Que cada primavera se viste de azahar, se deja atravesar por el Guadalquivir y se baña con el sol que le regala una luz y un clima inmejorables.
Sevilla puede resultar inabarcable en el primer viaje, por lo que vamos a dejar un buen sabor de boca durante la primera estancia, para incitar a pasar de nuevo las vacaciones en esta urbe edificada por Hércules y cercada por Julio César.
De la Fama a Santa Cruz
Sevilla nació en el barrio de Santa Cruz. Un intrincado laberinto de calles de arquitectura árabe al que acuden los sevillanos y turistas para huir del calor del sol en las horas centrales del día. Aunque hay más que sombra y frescor entre sus pasadizos. Sigue Leyendo