Hay varias formas de llegar a Los Ángeles. Puedes optar por recorrer la ruta 66 desde San Francisco disfrutando de las imágenes y la vida que rebosa la costa de California o directamente aterrizar en la ciudad con más famosos por kilómetro cuadrado. Nosotros nos hemos decantado por la segunda opción, porque Los Ángeles tienen mucho que ver, oír, escuchar y saborear. De hecho, se puede decir que es una ciudad infinita. A través de tres rutas vamos a recorrer sus rincones.
Datos de interés
Aterrizamos en Los Ángeles, en su aeropuerto homónimo, situado a 27 kilómetros de la ciudad. Desde aquí tenemos varias opciones: alquilar un coche, el autobús o el siempre cómodo tren. En todo caso es fácil llegar al centro o hacer una parada previa en Hollywood.
Nada más desembarcar del avión recuerda atrasar el reloj 9 horas y olvídate de los euros. El dólar es la moneda por antonomasia. Su depreciación respecto a la moneda europea es interesante y nos puede hacer ahorrar bastante en el viaje. Una vez en tierra debes llevar en la mano el pasaporte y el formulario ESTA (por aquello de la seguridad nacional). Puedes agilizar los trámites en el Departamento de Fronteras.
Por cierto, antes que lo pregunte, el nombre de Los Ángeles es un acrónimo de su nombre original con que denominó el asentamiento el español Felipe de Neve en 1781: Pueblo de Nuestra Señora la Reina de los Ángeles del río de Porciúncula.
Los Ángeles para toda la familia
En Los Ángeles, y más concretamente en Hollywood, se producen y realizan algunas de las producciones cinematográficas más taquilleras del mundo. Muchos de los dibujos animados que entretienen a nuestros hijos y hacen las veces de superhéroes nacen en los Estudios Universal de Hollywood.
La capital del entretenimiento en Los Ángeles es Universal Studios Hollywood, donde los sueños se hacen realidad. Este parque temático nos hace a todos un poco más niños. Cada año renuevan las atracciones haciéndolas coincidir con sus éxitos en el cine. En 2015 Universal cumple 50 años y lo celebra con dos atracciones donde han aplicado la última tecnología. Los Transformers de nuestra infancia y los traviesos Minions de la infancia de nuestros hijos son los protagonistas.
El parque cumple todos los requisitos para asegurar un día de diversión: juegos, desfiles, atracciones y la entrada en algunos de los estudios donde los personajes de animación cobran vida.
Muy cerca de los Estudios Universal, remontando Los Ángeles River, llegamos a otro escenario que disfrutar en familia. En realidad se trata de dos emplazamientos: el Parque Griffith y el Centro Nacional Autry.
En el parque Griffith volverás a enamorarte de los antiguos ferrocarriles. Puedes subir en cualquiera de los dos trenes que recorren las instalaciones. El paseo es gratis. Uno de los trenes recorre una milla hasta un pueblo del oeste atravesando bosques y puentes. El otro se dirige al Museo de los ferrocarriles, donde se conservan decenas de estas legendarias máquinas.
Junto a los ferrocarriles se encuentra el zoológico de Los Ángeles, junto al museo dedicado a Gene Autry y que es un homenaje al salvaje Oeste y a los años 80.
Tras los pasos de las estrellas
Conseguir la fama cuesta, pero cuando viajes a Los Ángeles no te costará nada pasear por el más famoso de los paseos pisando sobre el nombre de las estrellas y celebrities. Es poco probable que encuentres a tu actor o actriz por Los Ángeles, aunque siempre está la posibilidad de fotografiarte junto a su estrella en el Paseo de la fama.
El Paseo de la fama se extiende a lo largo del boulevard Hollywood y Vine Street. Sus aceras recopilan más de 2000 estrellas concedidas por la Cámara de comercio a personajes del celuloide. Una forma de reconocer su contribución al cine, la música, la televisión, la radio o el teatro.
En torno al paseo de la fama están algunos de los lugares más emblemáticos del Hollywood de las estrellas. El Museo Hollywood, en el edificio Max Factor, muestra 10000 objetos donados por los famosos a lo largo de un siglo de historia. Entre sus tesoros hay vehículos, fotografías, trajes y objetos de toda índole. Muchos los reconocerás de haberlos vistos en películas.
Muy cerca está Hollywood & Highland, la meca de todo turista que llega a Los Ángeles. Un centro comercial que homenaje al cine en cada centímetro cuadrado disponible. Siguiendo el boulevard se pasa ante el Teatro del Capitán, donde Disney escenografía algunas de sus más exitosas películas. Justo en la acera de enfrente otro clásico y visita ineludible: el Teatro Chino, donde se estrenan muchas de las películas rodadas en Hollywood y sí que es habitual ver a las estrellas. Y como colofón el Hotel Roosevelt, un histórico edificio donde se alojan las estrellas.
Hoteles y edificios con historia
Los Ángeles ofrecen multitud de caras a los visitantes. Hasta ahora nos hemos fijado en dos de sus rutas más llamativas. Un recorrido para toda la familia y paseo tras las estrellas. Pero Los Ángeles tienen mucho más, y lo demuestra en una ruta por sus lugares históricos más importantes.
Los viajeros que se alojan en el Hotel Millenium Biltmore comparten estancias, que no tiempo, con algunos de las figuras más famosas y populares del país. En sus 683 lujosas suites centenarias han dormido personalidades como el presidente Kennedy. Está muy bien ubicado en el centro de Los Ángeles, a un paso de los principales teatros. Aunque cuesta dejar sus estancias y galerías que transportan a palacios reales europeos.
Desde luego no se puede decir que se ha estado en un lugar hasta que no se ha probado su cocina. La gastronomía de Los Ángeles hay que probarla en el Mercado Central. Allí una docena de establecimientos permiten recorrer todo el mundo sin salir del plato. Comienza por los aperitivos y termina con los postres. Desde México a Tailandia. Aquí la comida es la estrella.
Si quieres ver un escenario de película debes apearte en Union Station. Este edificio colonial español ha sido protagonista involuntario de varias películas. Aún hoy sigue siendo un punto neurálgico para el transporte y para los turistas que se quedan embobados contemplando la opulencia de la vieja estación.
Y volvemos al teatro, en concreto al Teatro de Los Ángeles, en Broadway. Una joya arquitectónica levantada en parte gracias a los fondos aportados por Charles Chaplin. Al principio fue una lujosa sala de cine. Lo de “lujosa” lo entenderás en cuanto accedas al interior. Aunque si has visto el Palacio de Versalles de Francia no hace falta que entres, es una réplica inspirada.
Si te gusta el cine bélico tienes que ir hasta el puerto de Los Ángeles y embarcar en el emblemático USS Iowa. El buque de guerra de la marina estadounidense donde más presidentes han viajado. Ahora es un museo naval en toda regla, y sus cañones aparecen en algunas escenas de Hollywood.
Los Ángeles para rezagados
Viajar a Los Ángeles es fácil aprovechando algunas de las ofertas de SMS Vacaciones, lo más complicado es volver, porque en esta ciudad infinita siempre hay algo por ver, saborear, disfrutar y vivir. Hemos realizado tres rutas por los imprescindibles de Los Ángeles, aunque aún nos quedan algunas propuestas para los rezagados que deseen prolongar el viaje unos días más.
Frank Gehry fue el arquitecto escogido por Walt Disney para diseñar y construir el Disney Concert Hall, donde actúa la Orquesta filarmónica de Los Ángeles. El edificio recuerda al Museo Guggenheim de Bilbao, solo que las obras pictóricas se han sustituido por acordes. Por cierto, dicen que es uno de los edificios con mejor acústica del mundo.
Si viajas a Los Ángeles con tu pareja tenéis que ver atardecer en el paseo más romántico de California, el Muelle de Santa Mónica. Tampoco está de más dar un recorrido en góndola por los Canales de Venice. Y cuando llega la noche nada como cenar a bordo de un crucero frente a las playas de Malibu o en algunos de los más prestigiosos restaurantes de Estados Unidos, cuyos chefs han sido merecedores de varias Estrellas Michelín.
Esperamos que te haya gustado nuestro viaje a Los Ángeles y que pronto puedas descubrir todos estos rincones en persona.